Barça: ¿cansancio o algo más?

Confieso que hoy no tenía pensado escribir acerca de este tema, pero tras el Barça-Copenaghe de anoche en el que los de Guardiola volvieron a evidenciar muestras de flaqueza ante un equipo simplemente correcto y, sobretodo, tras volver a oír en las tertulias posteriores las mismas excusas de cansancio por el Mundial, me he puesto a investigar. Y, efectivamente, estas investigaciones han respaldado lo que ya me temía: en el Barça hay algo más que “cansancio”.

He estado buscando estadísticas del pasado Mundial de Sudáfrica. He comparado los datos de Xavi, el abanderado de toda esa tenebrosa travesía post-Mundial, con los datos de varios de sus “enemigos íntimos” como Xabi Alonso, Özil o Khedira.



Fuente: elaboración propia



Y he aquí los resultados. Todos ellos han jugado los mismos partidos en el Mundial (Alemania también jugó 7 porque, no lo olvidemos, jugó la final de consolación por el tercer puesto), y el bagaje de minutos es bastante similar. Si han jugado prácticamente lo mismo unos y otros, ¿cómo es que a los del Madrid no se les nota prácticamente nada por el momento y los del Barça (con Xavi a la cabeza) están ahogados desde el inicio de temporada? Creo que hay algo más detrás de este bajón culé.

El Barça actual poco tiene que ver con el primer Barça de Pep. Han vendido todo el músculo y altura que tenían en la plantilla. En el primer año de Guardiola el malí Toure Yayá fue pieza clave en los esquemas del Barça. Márquez aún tenía cierta gasolina en la reserva y Henry disfrutó de una segunda juventud. Todos ellos bastante altos y alguno como Touré con un músculo y fortaleza que te permitía dominar todo el centro del campo. También Ibrahimovic, a pesar de sus excentricidades, era una de las referencias por alto el año pasado.

Pero ahora… ¿dónde están ahora esos jugadores, o los recambios para esos jugadores? A Barcelona ha llegado gente como Mascherano (1,62 m); Adriano Correia (1,69 m) o David Villa (1,75 m). Así, con Piqué como única torre en el equipo, el Barça tiene perdida la partida por alto en la mayoría de ocasiones en ambas áreas, tanto para atacar como para defender, y en el centro del campo esa falta de músculo se nota.

 

Fijaos, he enunciado varias incorporaciones de renombre para el Barça pero ninguna que sirva de recambio para ese gran motor por ahora apagado como es Xavi. ¿Por qué no se ha traído un suplente de garantías para cuando el de Terrassa no esté sobre el césped? A mí solo se me ocurre una explicación: mala planificación. Se ha traído a Mascherano para hacer un trabajo que creo que no lo tiene claro ni el propio argentino, y mientras se han fiado plenamente del físico de Xavi... una operación de alto riesgo cuando Andresito Iniesta sigue arrastrando ciertos problemillas tras las lesiones. El Barça se ha fiado demasiado, pero hasta los mejores motores te dejan tirado de vez en cuando en medio de la carretera.

No me vale ese rollo de que sólo los jugadores del Barcelona están cansados, porque a poco que nos paremos a pensar nos damos cuenta de que hay otros equipos con jugadores que también llegaron muy lejos en el Mundial y que han empezado con un ritmo más que aceptable esta nueva temporada. Xabi Alonso, sin ir más lejos, está dando clases magistrales domingo tras domingo. Özil lleva la batuta ofensiva del líder de la liga española y uno de los invictos en Europa... y así podemos seguir con algún que otro ejemplo.

Muchas veces nos olvidamos del agotamiento mental. Este Barça ha ganado muchos, muchísimos títulos en muy poco tiempo. No voy a decir que el Barça ya no tiene hambre de títulos. Un chuletón gusta siempre, pero si ya te has comido antes una buena ración de caviar…

Todos estos síntomas se acentúan cuando tu enemigo íntimo sale al campo con un ritmo de juego que ahora mismo nadie lo tiene en España y muy pocos en Europa, con un equipo que ya está metiendo goles pero que sigue sin encajarlos, y con unas estadísticas que le alejan de ese equipo abonado a recibir chorreos en los momentos importantes. Vasos comunicantes, lo llaman.

Ni mucho menos estoy matando al Barça de cara a lograr títulos y objetivos esta temporada, simplemente me parecía de justicia sacar unos datos y estadísticas objetivos para empezar a derrumbar esa corriente ya instalada en el fútbol de que el Barça está cansado porque tiene mundialistas en sus filas. Aquí se ha visto, o se ha intentado mostrar y razonar, que si esa teoría fuera del todo correcta habría otros equipos en unas condiciones muy similares.

Por cierto, ¿a todas estas cositas habrá que sumarle la carga psicológica de todo el caso Laporta? Iremos viendo con el paso de las semanas y los acontecimientos judiciales si afecta o no al vestuario, pero eso ya lo dejamos para otro momento…